Tijuana, B.C. — Un choque entre dos vehículos volvió a poner en evidencia los peligros latentes en el cruce del bulevar General Manuel Márquez de León y Padre Kino, justo a un costado de la línea SENTRI. Tres personas resultaron lesionadas tras la colisión de un Nissan Versa y un Kia Río, ambos de color blanco y con placas de Baja California.
El accidente ocurrió esta mañana, en una vialidad donde ya se ha vuelto común el rechinar de frenos y el estruendo del metal. Paramédicos de la Cruz Roja llegaron al sitio para atender a los lesionados, quienes fueron trasladados en condición estable al ISSSTECALI y al Hospital General.
Pero más allá del reporte médico, el incidente volvió a encender las alarmas entre vecinos de la zona. Ricardo Romo, residente desde hace más de una década, compartió que la curva donde ocurrió el choque es un punto crítico: “Aquí ya han pasado varios accidentes porque muchos dan vuelta en ‘u’ sin precaución. Siempre hemos dicho que falta un muro de contención”.
Ricardo no habla al aire. Durante años ha insistido ante dependencias municipales en la instalación de una barrera física que recorra el bulevar hasta la glorieta de Padre Kino. Su propuesta, sencilla y urgente, busca evitar más impactos como el de hoy.
Elementos de la sección de tránsito de la Policía Municipal realizaron el peritaje correspondiente para deslindar responsabilidades. Sin embargo, en el pavimento aún quedaron las huellas de un accidente que, como muchos otros, pudo haberse evitado.
Mientras los vehículos eran retirados y el tráfico volvía a fluir, quedó la pregunta en el aire: ¿cuántas vueltas imprudentes más se necesitarán para que la infraestructura vial atienda los riesgos que ya todos conocen?
