Tijuana, B.C. — Mientras la ciudad duerme, hay quienes trabajan entre estructuras colosales y maquinaria pesada para que la modernidad avance. Pero este lunes por la noche, el progreso cobró factura. Dos obreros que laboraban en la construcción del viaducto elevado resultaron heridos tras un accidente en la zona de obra.
El incidente ocurrió en condiciones aún no esclarecidas, cuando un gancho metálico —parte de la maquinaria que se utiliza en la obra— se precipitó y golpeó directamente a dos trabajadores en las piernas, dejándolos tendidos sobre el concreto.
Uno de ellos, Jorge Antonio, de 34 años, sufrió un severo aplastamiento en su pierna derecha. Su compañero, un joven de 28 años, fue diagnosticado con lesiones en la rodilla izquierda. Ambos fueron auxiliados por elementos del Cuerpo de Bomberos y paramédicos de la Cruz Roja, quienes lograron estabilizarlos en el sitio antes de su traslado a un hospital.
La escena, alumbrada por luces de emergencia y el ruido lejano de maquinaria aún activa, contrastaba con el silencio de la noche. Mientras sus compañeros observaban con angustia, los heridos eran subidos cuidadosamente a las camillas.
Hasta el momento, las autoridades no han ofrecido una versión oficial de lo ocurrido ni detalles sobre posibles fallas en protocolos de seguridad. La obra continúa, pero las preguntas quedan en el aire.
¿Quién cuida a quienes construyen la infraestructura de la ciudad? ¿Cuánto vale una pierna frente al avance de una vialidad?
Mientras tanto, dos familias esperan fuera de un hospital, aferradas a la esperanza de que sus seres queridos puedan volver a caminar… y que este accidente no quede enterrado bajo el concreto del olvido.
Fotografía: Arturo Rosales.