La Secretaría de Seguridad del Estado ha retirado más de 1,600 cámaras de videovigilancia instaladas de forma irregular en diferentes municipios de Baja California, siendo Tijuana la ciudad con el mayor número de decomisos.
Así lo informó el titular de la dependencia, el General Leopoldo Tizoc Laureano Carrillo, tras concluir la conferencia matutina encabezada por la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda. Según detalló, cerca de 600 de estas cámaras fueron retiradas en Tijuana, lo que representa más de un tercio del total asegurado.
“Tenemos casi más de mil 600 cámaras retiradas, de las cuales casi 600 son aquí en el municipio de Tijuana, aquí es donde tenemos la mayor cantidad de cámaras retiradas”, declaró el funcionario ante medios de comunicación.
Carrillo explicó que la facilidad con la que actualmente se puede adquirir un circuito de cámaras representa un reto para las autoridades, ya que constantemente localizan nuevos dispositivos instalados de forma irregular en distintas zonas urbanas.
Indicó que estos aseguramientos no solo representan un golpe a las estructuras que operan al margen de la ley, sino que también han contribuido a mejorar la efectividad de las operaciones policiales. Las cámaras ilegales, subrayó, muchas veces son utilizadas para vigilar movimientos de unidades oficiales o planear ataques.
“Es como podemos tener mayores posibilidades de éxito en las operaciones”, puntualizó.
El secretario agregó que, pese a la captura de diversos objetivos prioritarios en la ciudad, no se ha registrado un repunte en los homicidios. “Efectivamente, nosotros esperábamos que hubiera un repunte en los homicidios, que afortunadamente no hemos visto”, concluyó.
La estrategia de aseguramiento de dispositivos ilegales continuará en las zonas donde se ha detectado su uso frecuente para actividades delictivas.
