Tijuana, B.C. — Desde el 4 de julio, no hay rastro de Christian Daniel, Dulce, Christian hijo y Leonardo. Cuatro integrantes de una misma familia que, según su hija y hermana, Daniela Pelcastre, desaparecieron en circunstancias extrañas mientras se encontraban en un predio del Ejido Chilpancingo, en la zona de Ciudad Industrial.
Lo que inició como una denuncia en redes sociales, rápidamente escaló hasta convertirse en una carpeta de investigación activa por desaparición. Daniela asegura que su familia podría haber sido víctima de un secuestro, aunque las autoridades aún no tienen elementos para confirmarlo.
Durante una rueda de prensa, el fiscal especializado en personas desaparecidas, Fidel Corvera, explicó que la familia fue vista por última vez en el predio donde Christian padre trabajaba como cuidador desde hacía seis meses. El dueño del terreno declaró no saber nada sobre su paradero ni tener conflictos con ellos.
Esa noche también desaparecieron un tráiler y una pipa del mismo sitio. Ambos vehículos fueron localizados abandonados al día siguiente, pero sin señales de los Pelcastre Magallanes.
Hasta el momento, no se ha recibido ninguna llamada pidiendo rescate. Tampoco hay indicios que relacionen el caso con alguna actividad ilícita, aunque las autoridades no descartan ninguna línea de investigación.
Tijuana ha visto muchas desapariciones. Pero cuando una familia entera se esfuma sin dejar rastro, la ciudad entera contiene la respiración.
